Meteoritos muestran que Marte tuvo mucha más agua de la que se pensaba
Experimentos de laboratorio arrojaron que el planeta rojo contaba con un mineral que no existe en la Tierra. La NASA espera construir un campo magnético que le devuelva la humedad a Marte para hacer más fáciles las futuras misiones.
De acuerdo con un estudio publicado en la revista Nature Communications, científicos de la Universidad de Nevada, en Estados Unidos, aseguran que Marte pudo haber sido un lugar mucho más húmedo de lo que se creía hasta el momento. La clave está en un mineral que se encuentra de forma habitual en los meteoritos marcianos pero que no se produce en la Tierra.
Los expertos creen la merrilita, considerado como una de las pruebas que arrojaban un pasado seco en el planeta rojo, pudo haber sido originalmente whitloquita, un mineral rico en hidrógeno que está más relacionado con la presencia de agua.
Para comprobar la teoría. Los científicos crearon una versión sintética de la whitloquita e hicieron un experimento de choques que simulaban la expulsión de meteoritos de Marte. Bombardearon las muestras con láminas de metal disparadas desde un cañón de gas presurizado a una velocidad de hasta un kilómetro por segundo. Después se estudió la composición microscópica en experimentos de rayos X que arrojaron lo que se suponía: la whitloquita puede deshidratarse por este tipo de perturbaciones y formar la merrilita.
Así mismo, cientoficos de la NASA creen que, como la Tierra, Marte tuvo alguna vez un campo magnético que protegía su atmosfera y daba la posibilidad de ser un lugar cálido y húmedo. Así que, para hacer más viables las próximas misiones que esperan lograr conquistar el planeta hacia 20130, la agencia espacial propone desplegar un escudo magnético en Marte para restaurar su atmósfera “de forma natural”. De funcionar, el plan convertiría el planeta en un mundo mucho más parecido al nuestro, con agua de nuevo fluyendo por su superficie, lo que facilitaría el bienestar y la seguridad de los astronautas.
El equipo de la NASA cree que este proceso podría llevar a que se restablezca una séptima parte de los océanos que cubrieron Marte hace miles de millones de años.